martes, 10 de abril de 2007

"Para un amigo que un día se me fue"

Hola loco... ya todo para mí ha cambiado, es que yo esta vida no la entiendo y nunca la entenderé, ¿por qué te tuviste que ir tú? Ese dolor que ahora tengo jamás lo borraré, poco a poco la herida cerrará pero nunca del todo se curará. Esos momentos contigo me han dejado una gran huella en el corazón, pues tú ocupabas una gran parte ahí, y ahora que ya no estás esa gran parte me quedará vacía y jamás nadie la podrá llenar porque ese trozo te pertenece sólo a ti. Mí vida está vacía, sé que ahora es normal sentirse así, pero la verdad es que así se esta muy mal, es que es la primera vez que me pasa y espero que jamás vuelva a pasar... ahora que ya no estás, siento y veo todo lo que te quiero y las cosas que no te podré decir... A veces me hacías enfadar, pero siempre me compensabas esos enfados cuando me hacías reír, porque una sola sonrisa borra todo lo demás. Espero que donde quiera que estés, estés bien y alegre como siempre estabas tú, y que cuando me veas me cuides y me lleves por el mejor camino. Sé que ahora me siento mal y por eso lloro, aunque la gente me dice que a ti no te gustaría verme así, pero es algo que no se puede evitar... También me dicen que me quede con los recuerdos, pero sé que de recuerdos no se puede vivir aunque a veces te hacen sentirte bien. Ya me iré despidiendo aunque me duela en el alma, sé que no es una despedida final; pues algún día nos veremos allí, donde todos tenemos que acabar, pero es que tú te has ido demasiado pronto, quizás él te necesitaba allí, pero yo sé y siento que aquí con nosotros estabas mejor y nos hacías mucha más falta... La vida es algo que nunca llegaré a entender pero bueno, todo sigue y todo pasa y aunque la vida sigue, no será igual y todo cambiará... Tú eras mi loquito, eras mi sonrisa y la mayoría de mis momentos... Ahora todos vemos las cosas negras, pues cuando pasa esto, ¿quién ve algún color?, aunque poco a poco todo irá cogiendo un poco de ese color que se perdió al irte tú... La gente te recuerda, y comenta lo bien y a gusto que se sentían contigo... aunque no te lo pareciera la gente te quería mucho y ahora te va a echar de menos. No se ni cómo acabar, ni cómo despedirme, ni cómo terminar... Bueno, como no me gustan las despedidas te diré una última cosa... Las clases no serán lo mismo sin ti, esa excursión va a estar vacía y sobre todo tus amigos y tu familia lo van a notar, pues te has tenido que ir tú, una persona divertida, risueña y sobre todo un verdadero amigo. Para todos eras especial, algunos te conocían de clase, otros del recreo y algunos simplemente de vista, pero tal y como se ve en el instituto todos te echarán de menos a su manera... Los profesores por tu forma de comportarte y de ser en clase, tus compañeros por tus bromas y por tus sonrisas, tus amigos por todo, tus padres porque eras su hijo y te han visto crecer y han compartido 16 años de su vida contigo y yo porque para mi te habías convertido en alguien muy especial, en un amigo, un compañero y un ejemplo a seguir... Hasta luego, ya que no soy capaz de decirte adiós... ¡¡¡TE QUIERO MUCHO Y JAMÁS SERÉ CAPAZ DE OLVIDARTE!!!

Lo último que quería decir es que este gran golpe nos ayude y nos haga entender que la vida no es ningún juego y que al igual que le ha pasado a Jorge le podía haber pasado a cualquiera de nosotros.


BUENO, QUE NO ME VOY A OLVIDAR DE TI Y QUE SÉ QUE TÚ ESTARÁS AHÍ SIEMPRE ALUMBRANDO NUESTRO CAMINO Y CUIDANDO DE TODOS.

TE QUIERO

Diana Martín Hernández; 4º E.S.O. (A)